EL SUEÑO DE DIOS PRONTO SERÁ EL SUEÑO DEL HOMBRE
**************
9 de junio de 2012.
Jesús, Fruto de DIOS, Amor de DIOS hecho
Hijo de DIOS por Tu obediencia al Padre, ten piedad de nosotros.
Palabra divina, descendida de los
cielos para encarnarSe en María, ten piedad de
nosotros.
Jesucristo, llamado a salvar a los
hombres, ten piedad de nosotros.
Jesús, Puente tendido entre la
Tierra y el Cielo por la Santa Voluntad de nuestro Padre, ten piedad de
nosotros.
Jesucristo, Cruz viviente y
salvadora de sufrimiento, de gloria y de gozo, proyectada desde el Cielo para
salvar a los hombres, ten piedad de nosotros.
Camino de DIOS, que se abre para
orientar a los hombres desde el seno de la Virgen María, guíanos a través de
las áridas llanuras de este mundo.
Jesús, Hijo de María, Niño del Cielo
y de la Tierra, Hijo de lo Infinito y de la Omnipotencia, ven en nuestro
socorro. Nosotros esperamos “Vuestro Día”, Señor magnífico de Gloria y de
Bondad.
Elévanos hacia el Padre, así como Tú
fuiste elevado el día de la Ascensión hacia Él.
No
olvides a ninguno de los hijos del Padre que Tú entregaste a Tu Santa Madre,
ese Día sagrado de Gloria de Tu Santa Cruz, donde nos salvaste haciéndoTe, Tú mismo, esa Cruz triunfante de Gloria,
palanca universal que levantando la Tierra y los hombres, nos hará descubrir el
gran Sueño del Padre: el Nuevo Reino de DIOS, donde los Cielos y la Tierra
celebrarán su mismo acuerdo.
En ese grande y memorable Día en que
el Señor fue enviado por Su Padre para salvar el Mundo, salvando Su tierra de
Amor, Él hizo de todos los hombres “los Reyes del Universo” para unirse al
Padre.
Cristo, con Su Santa Cruz, guardará
para siempre el más bello título que haya habido:
JESUCRISTO, Hijo del Padre, Salvador universal del Mundo.
Si el mundo hubiera sabido y si se pusiese a buscar aún
en el fondo de él (y no en las estrellas), a este Dios escondido en cada uno de
nosotros, enseguida habría comprendido quiénes somos, de dónde venimos y a dónde
vamos.
Simplemente, comprender que DIOS es el Alfa, para hacerse
Omega:
Padre-Hijo-Espíritu Santo y añadiendo a todos los hijos de la Tierra ofrecida a Jesucristo, divina como todo lo que ella contiene, por su creación por DIOS.
Había que esperar a todos los hijos
de Dios, que Le reconocerían en Jesucristo, el Dios hecho Hombre para salvar al
hombre, Su hijo real.
¡Gritadlo sobre los techos!
Pero, ¿quién es María? La Iglesia os
lo dirá pronto, tan pronto como cada uno comprenda que basta un simple
“reconocimiento” de quién es Jesucristo.
Yo signo con la cruz de Jesús.
DIOS os habla por JNSR
†
† †