LA TIERRA DARA A LUZ A LA NUEVA TIERRA

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7 de julio de 2008.

 

 

 

JESUS:

            Como vosotros ya lo habéis comprendido, la Tierra se ha convertido en una tierra de sufrimientos. Los hombres sufren, los animales sufren, la vegetación sufre y se rarifica, a causa de un desarreglo climático. ¡Una Tierra tan bella! Ella es la imagen de las madres a quienes sus hijos han abandonado, creyendo siempre que una madre está hecha para dar sin cesar y un hijo para pedir.

            Y he aquí que Dios, que ve todo, os dice: “¿Qué habéis hecho de la Libertad que Yo os di? Vosotros lo habéis desarreglado todo. En Confianza, Yo os he dado Mi Tierra en gerencia y vosotros habéis creído que explotándola como a una esclava, ella no se volvería jamás contra vosotros…”

            Mas todos los elementos, toda la naturaleza, todos los animales conocen a su Creador, Le respetan y Le adoran. Vosotros veréis que, a Mi Señal, ellos se reunirán donde Yo lo desee, mientras que el hombre dudará para ser salvaguardado del diluvio final, que será de Fuego.

            Entre ellos se respetan y se respetarán aún más en la Nueva Tierra: “El león dormirá al lado de la cierva”.

            Vosotros Me forzáis a arrebataros de vuestra Tierra, pues ella ha entrado en una fase de destrucción. Pero Yo soy vuestro Padre y Yo os protegeré.

            Y esto es un efecto de Mi Bondad de informaros sobre lo que se va a producir, aun antes de que los indiferentes tomen conciencia de la urgencia de ponerse al abrigo. Vosotros vais a entrar en la fase de la gran Purificación. Algunos ya sienten por sí mismos que Dios Se aproxima rápidamente, pero la Llamada se hará en el momento en que las convulsiones, los temblores y las sacudidas de la Tierra ya no sean soportables para la Humanidad, que va a comprender que la Tierra, la Madre Nutricia, está en vías de dar a luz a la Nueva Tierra, en las Manos de Dios que la purifica y le da esa energía nueva que comienza a hacerle falta.

            Pues ella está agotada, por todos los servicios prestados a los hombres que, en retribución, la han contaminado, maltratado, forzándola a tragar toda suerte de venenos para producir más, al punto de asfixiarla. Entonces, ella os dice:

            “Partid inmediatamente, cuando el Dios de Bondad os lo diga, porque hasta el mismo aire que queda me asistirá y terminará su curso conmigo”.

            Por ella misma, la Tierra alumbrará una Nueva Tierra y el aire ya no será el mismo: será más puro, lleno de Amor, como los seres que volverán a habitarla. Todo será puro y bello porque el Amor, que es Dios, lo habitará con todos sus hijos.

 

JESUCRISTO