YO LLAMO AL MUNDO ENTERO

Yo SOY el Eterno

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30 de junio de 2008.

 

 

JNSR:

            El Señor dice:

            “En las redes que Yo Mismo lanzaré con Mis Apóstoles de los últimos Tiempos, habrán algunos que, con elegancia, se harán grandes ricos, con el sudor de los pobres y algunas veces con la ayuda de la mentira, del robo y hasta del crimen. Pero cada uno, en ese mismo momento, verá de nuevo su falta y la pagará con su propio tormento. La Justicia de Dios es igual a Su Misericordia.

            Entonces, vosotros que queréis repartiros Mi Ciudad de Jerusalén, Pueblo árabe así como Pueblo judío, ¿no estaréis vosotros en esta red? Codo a codo y tan cerca como gemelos inseparables, entonces ¿por qué jugáis con la vida de los hermanos enemigos? Hermanos, del mismo padre Abraham que os ama igualmente, por ser de su misma simiente.

            Abraham lanzó su red en medio del desierto y pescó dos hijos que, hasta el presente, formaron dos Pueblos divididos, teniendo la ira como única visión. La misma sangre corre por vuestras venas. ¿No podéis comer del mismo plato, como hizo vuestro padre Abraham, sentado en la arena del desierto con su familia a su alrededor?

            Hará falta que tanto al uno como al otro, Yo os despoje de todos los bienes para que, unidos, subáis hasta Mi Montaña Santa, que estáis en trance de demoler, reclamándola tanto el uno como el otro, con un derecho que Sólo Yo detento y con un Poder que puede abatir, con Mi solo Aliento, vuestras casas.

            Pero Dios dice, dirigiéndoSe a los Judíos (Lc 11, 52):

            “¡Ay de vosotros, doctores de la Ley, que os habéis apoderado de la llave de la ciencia; y no entráis vosotros, ni dejáis entrar a los demás! Negando a Jesucristo.

            Lc 12, 2: “Pues nada hay tan oculto que no se llegue a descubrir, y nada tan secreto que no se llegue a saber”.

            Hoy, soy Yo, JESUCRISTO, quien reclama a la Ciudad de Jerusalén (Lc 13, 34): “¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise reunir a tus hijos, como una gallina a sus polluelos bajo las alas, y no quisisteis!”.

            Mt 23, 38-39: “He aquí que se queda desierta vuestra casa. Porque os digo que no Me veréis hasta que digáis: ¡Bendito el que viene en Nombre del Señor!”. Porque Yo soy el Hijo de Dios, Aquél cuyo Nombre ha estado oculto.

            Lc 15, 3-6: “Entonces les propuso esta parábola:

            “¿Quién de vosotros, teniendo cien ovejas, si se pierde una, no deja las noventa y nueve en el desierto y marcha en busca de la perdida hasta que la encuentre? Luego, al encontrarla, la pone sobre sus hombros, lleno de alegría; y al llegar a casa, llama a los amigos y vecinos, diciéndoles: “¡Alegraos conmigo, porque he encontrado mi oveja perdida!”.

           

JNSR:

            Pueblos, incontables como la arena del mar, vosotros veréis:

            - los montes caer rodando en avalanchas de lodo arrastrado por el odio que habita el mundo, entre países, entre hermanos;

            - Los peñascos resquebrajarse y el mar que no puede contener más su fuerza y viene para lanzarse con furia sobre las costas, destruyendo las viviendas y los habitantes y haciendo huir la Vida, que no tiene más el derecho a existir, porque los sismos, los tornados, los ciclones y hasta el agua del cielo y el agua de los ríos, buscan, en un mismo GRITO con Dios: “¿Dónde están Mis hijos? ¡Yo quiero hasta el último!”.

            Yo quiero recogerlos a todos, porque, he aquí que Yo construyo este Mundo que, por todos lados, ha olvidado quién es su Creador, Ese Mismo que es la Vida de todas las cosas, desde la más pequeña hasta la más importante.

 

JNSR:

            El caos siempre procede de una confusión general y, aunque ello parece y os parezca desordenado, las fuerzas que lo constituyen reaccionan por alguien. Ese fue el caso en la Creación del mundo, materia y elementos se conjugan juntos. Solo Uno puede actuar así, en el mundo, Solo Uno a quien el Universo entero obedece, un Solo Dios Único y Verdadero en Tres Personas, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Amén.

            Sin perder Sus Poderes, el Padre ha dado a Su Hijo todo Poder. Sólo el Amor puede hacer semejante milagro. Así, el Mismo Dios Se declara: Yo SOY el Amor.

            El Amor construye. El “desamor” destruye. Si JESUCRISTO, mediante Su Palabra de Amor y Su Espíritu de Amor ha construido todo el Universo, ¿Quién está en trance de destruir todo, comenzando por Su Tierra, el planeta azul? ¡El aire y el agua, por la contaminación, por la invención de nuevas creaciones de vida, por la anulación de la Vida en Dios! El hombre mata los fetos, él se mata a sí mismo. Genéticamente, mata la vida de los cultivos sanos y naturales, mata su propio alimento. Mata la fauna y la flora; ¡él estudia cómo componer otra creación distinta a la de Dios! El ya hace monstruos de carne y de espíritu, trastornando la educación de los niños pequeños.

            El hombre mata al hombre. El mata, contamina y además, tras esta destrucción en serie, quiere tomar el lugar de Dios. Hele aquí, creador de una nueva creación, ignorando el Amor Verdadero que es la base de toda la Creación y de todo cuanto ha sido creado por el Amor de Dios y por el Amor a cada uno.

            El amor egoísta destruye la Armonía de todo, y todo cae rodando, arrastrando al hombre a este abismo. Pero Dios no puede dejar por más tiempo el poder al hombre que, posiblemente, sin darse cuenta de su locura, está asociado con Satanás, el enemigo de Dios y de los hombres.

            En este momento, el Señor desea iluminar hasta Su última Oveja, para que ella rechace la contaminación por la información satánica y todo lo que hace caer al mundo actual: poder, dinero, sexualidad. Todo lo que ha constituido la Bestia y que la Bestia ha alimentado con su estupidez (Ap 13), siguiéndola. El “mar”, son los países.

 

Ap 13, 1: Entonces vi surgir del mar una Bestia que tenía diez cuernos y siete cabezas. Sobre sus cuernos tenía diez diademas, y sobre sus cabezas, nombres blasfemos.

            2: La Bestia que vi era semejante a una Pantera; sus pies eran como de un oso y su boca como la de un león. El Dragón le dio su poder y su trono con un gran imperio.

            3: Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su llaga mortal había sido curada. Toda la tierra, maravillada, seguía a la Bestia.

            4: Adoraron al Dragón, porque había dado poder a la Bestia, y adoraron a la Bestia, diciendo: “¿Quién es semejante a la Bestia y quién podrá combatir contra ella?”

            5: Le fue dada una boca que profería palabras arrogantes y blasfemias; y le fue dado poder de hacerlo durante cuarenta y dos meses.

            6: Abrió su boca para blasfemar contra Dios, blasfemar Su Nombre y Su Morada y los que habitan en el Cielo.

            7: Y le fue dado hacer la guerra a los santos y vencerlos; le fue dado poder sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación.

            8: La adorarán todos los habitantes de la tierra, cuyos nombres no están escritos desde el principio del mundo en el Libro de la Vida del Cordero degollado.

            9: ¡El que tenga oídos, que oiga!

            10: Si alguno está destinado a la cautividad, irá a la cautividad; el que mata con la espada, a espada morirá. Aquí la perseverancia y la fe de los santos.

JNSR:

            La Bestia es esta ESTUPIDEZ del mundo, que suplanta actualmente la SABIDURIA de Dios. Aquí, yo repito las palabras de San Juan en este texto del Apocalipsis: “La Bestia que surge del mar” (Ap 13, 1) Estamos muy cerca, bien cerca ya que ella está a punto de encontrar a La Bestia de la Tierra, que es verdaderamente el Anticristo. Luego, tras el tiempo de 3 años, 6 meses y 15 días dichos por Daniel, que equivalen al dado por el propio San Juan aquí mismo, le fue dado el poder de actuar durante 42 meses (3 años + 6 meses), el Tiempo que separa una Bestia de la otra Bestia, con la Bendición del Dragón, que no es otro que Satanás, el espíritu del Mal.

            Vosotros habéis podido constatar cuanto, nuestro Señor JESUCRISTO, el Señor de la Historia, dirige a Su Pueblo. Y cuando nos dice a través de San Juan en este texto (que aún nos estaba sellado), este Tiempo en el cual estamos, Apocalipsis 13, 4, que esta Bestia va a actuar aún por 42 meses, que en el texto precedente es Daniel quien nos dice la misma cosa: 3 años, 6 meses, 15 días. 15 días más. Dichoso aquél que espere y que llegue a tener 15 días adicionales.

            El Señor me ha explicado y me inspiró a escribir estos dos textos. La Bestia del mar, es esta Estupidez actual con la que el Dragón ha halagado, en cada País. “El mar” significa todos los habitantes de la Tierra: todos han sucumbido a los placeres, al dinero, a los vicios. La depravación es general, el Dragón ha tenido éxito en su tentación.

            Dios ve la disolución de las familias, los sacerdotes que olvidaron su verdadera función, los niños educados en la perversidad y el robo, los crímenes gratuitos. Y sobre todo, el querer igualar al Creador: crear hombres-animales, matar los fetos por la ciencia o por la tranquilidad de las madres. Matrimonios contra natura y los cultivos que corren al desastre, tanto para el hombre como para los animales.

            La Tierra está lista para recibir al enviado especialísimo de Satanás. El, que es el espíritu del Mal, va a encarnarse en esta Bestia de la Tierra, que es el Anticristo en persona, que ya está en la Tierra, tras la lista memorable de los anticristos precedentes, que han abierto el camino del Infame, que luchará contra el propio JESUS.

            Este es aquél que se prepara a tomar el primer lugar en el mundo. Vosotros le reconoceréis muy pronto, y felizmente, no por largo tiempo. Así como a la Bestia del mar (la Estupidez del Mundo), vosotros estaréis prestos a seguir a la Bestia de la Tierra, que os será presentada como “el más grande profeta”, superando al mismo JESUCRISTO.

            Es el Mundo, los habitantes de la Tierra quienes, habiendo hecho su elección, ya han preparado todo para que él arribe triunfante, formando sus ejércitos de la Tierra, “los sin-corazón ni fe”, luchando contra “los Amigos de Dios”, que al final triunfarán, al ofrecer a Dios la contrición total de todas la ofensas hechas contra Su Divina y Adorable Majestad. Y ofreciéndoLe el Perdón           rehusado por todas las criaturas de la Tierra, y esto desde que JESUCRISTO abrió Sus brazos, completamente, en Su Santa Cruz, para acoger a todos los hijos del Padre. Refugio ignorado y una vez más rechazado por la Estupidez del Mundo, esa Bestia alimentada siempre por el señor del Mal.

            Es por eso que JESUCRISTO todavía desea salvar al hombre, curarle de su tentación y abrirle los ojos en su última elección. Sólo la Iglesia de JESUCRISTO puede ayudar, por su Humildad y por la riqueza que ella ha recibido de las propias manos de JESUCRISTO, por las manos de sus Apóstoles Benditos: el Pan de Dios, la Divina Eucaristía, que se entrega por el Perdón del Horror actual que casi todos los hombres han promovido, ignorando que Yo SOY el Único Dios, el Creador Universal de todo lo visible y lo invisible, Aquél que Vive desde toda la Eternidad. Y que, si Yo vuelvo una vez más en medio de vosotros, enviándoos a Mi Hijo Único, es para retirar de las garras de Satanás hasta la última de Mis Ovejas.

            Es por esto que Yo pido a todos los Pueblos de la Tierra destruir los ídolos, antes de que Mi Hijo, Adorado por todo el Cielo, ponga un pie sobre vuestro mundo. Porque nada de lo que vosotros habéis vivido hasta el presente es semejante al Rayo del Altísimo, que El podrá arrojar sobre el mundo entero, si seguís respondiendo con una sola desobediencia a Dios,

El Único Señor de toda la Creación

por los siglos de los siglos.

            Esto no puede ser puesto en duda porque, a esta mano que lo escribe, si esto viniese de ella, ya la habría derribado Mi Santa Voluntad.

Yo SOY el Eterno

y Yo llamo a vuestra prudente obediencia †

Amén

Aquél que es Dios Padre,

Dios Hijo y Dios Espíritu Pacificador.

Amén

 

  

 

 

JNSR: cada Sacerdote está invitado a celebrar una Misa en Honor de nuestro Dios de Misericordia y por el Arrepentimiento Mundial. ¡Gracias!