EL SILENCIO ES DE ORO

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12 de febrero de 2008.

JESUS:

Cuando el Mensajero del Señor es atacado desde el exterior, él recibe una señal de Dios, poniéndole en pausa. El debe reentrar en el silencio por un tiempo.

Dios habla al Mundo a causa de Su Amor por Sus hijos.

La elección de Dios no puede ser discutida. ¿Por qué el oro y las piedras preciosas han sido guardados en las tierras incultas y salvajes del planeta? ¿Por qué los Mensajes son a veces como esas tierras? ¿Y por qué tantas dudas y tantos juicios contra ellos?

No son ellos los inaccesibles, es Dios. La Confusión es el arma del Mal. Y el juicio es el arma del débil, que contribuye a la demolición de la obra de Dios.

Vosotros no podéis atrasar, ni hacer atrasar la Hora de Dios.

Pero podéis tornar el momento más difícil para algunos. Las palabras del Mensajero son palabras humanas, proferidas en esta Tierra. En ellas, con su entonación, su modulación, viene la natural dificultad para adoptarlas y ellas no se adaptarán a toda clase de escucha. Entonces, hay que buscar en ellas, Mi Palabra. Aunque el Instrumento no sea del gusto de algunos. En ellos, buscad, sobre todo, el porqué de su interés en venir hasta vosotros.

Pues los Mensajeros conocen también vuestros pensamientos y están ahí para transmitiros lo que ellos han guardado preciosamente en su corazón: Mi Palabra ofrecida en Mi Amor por todos.

Ellos son vuestros servidores. No los despreciéis.

Ellos no piden más que vuestra escucha.

Palabra de JESUCRISTO.

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