YO HABLO A TODO MI PUEBLO: ¡ESCUCHADME!

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22 de enero de 2008.

 

 

JNSR:

            Dios mío, yo Os pido que Vuestra Santa Gracia venga en auxilio de vuestros hijos. No permitáis que las fuerzas malignas, con las malas informaciones, tengan superioridad sobre la Verdad. Señor, ¿qué pasa verdaderamente?

 

JESUS:

            Yo ya te he advertido que esta lucha contra Dios y Su Iglesia es precisamente el combate de David contra Goliat. Y todas las manos deben tenerse en posición de súplica, tal como las manos de Moisés, sostenidas por Hur y Aarón. Pues, Dios Nuestro Padre Se deja tocar y da Su Santa Gracia, cuando se toca en Su Santa Verdad.

            Esta lucha, comenzada en Italia y dirigida hacia el más alto Dignatario de Mi Iglesia en la Tierra, es una guerra declarada contra el propio Cristo.

            Esta País ha sostenido a la Cristiandad y Mi Papa lo ha bendecido. Todos vosotros conocéis la suerte de los Mártires. Tal como Pablo, este País, que lo han querido pagano, se ha devuelto y, como un Sujeto sólo del Cristo JESUS, helo ahí de pie, recobrando la vista y aclamando a Dios delante del mundo entero.

            Nación por Nación, Yo las conquistaré todas, porque en esta guerra, Yo ya te lo he dicho, en el país que tome las armas nucleares, ellas se volverán contra él.

            El pretexto utilizado para aniquilar la Cristiandad en su propia sede, acaba de fracasar, entrañando la más grande animosidad conocida en estos Tiempos.

            Como un petardo mojado, no se ve sino rabia y desilusión en el campo de los enemigos de Dios que, poco a poco, se descubrirán por todas partes. Bajo el simple, pero cruel pretexto de la laicidad para todos, una fuerza se manifiesta de nuevo en vuestro país, que es portador de tantos recuerdos cristianos. Que Francia no se sienta al resguardo, porque ella ya casi adoptó la laicidad, que la hace semejante a una estatua, cuyo busto tiene todavía la apariencia de la vida (es su pasado cristiano) y la parte inferior del cuerpo es de una materia nueva, una suerte de yeso diversamente coloreado y presto a desmoronarse, como el Poder del momento, atacado por todas partes.

 

Esta estatua vacilante, es la Francia de hoy,

cuando ella debía sostener a todos los países y mostrar su poder al lado de todos, en tanto Hija mayor de la Iglesia. Como fue el caso, igualmente, de Italia, donde las fuerzas enemigas de Cristo querían marginar a la Iglesia y al Papa, Vicario de Cristo en la Tierra.

            Mi Papa ha preservado su dignidad de todo ataque de sus opositores en la Universidad de Roma, y después, el domingo, una inmensa multitud lo aclamó en la Plaza de San Pedro. Pero, en esta oposición al Papa, está la señal precursora de la acción disimulada de Mi Enemigo en el Vaticano, como Yo te previne en diciembre. Permaneced vigilantes y rezad, rezad para sostener a Mi Iglesia y a Mi Papa.

            Hija Mía, Yo te hablo para advertir al Mundo de todo lo que se trama ya en el mundo, y tú debes avisar inmediatamente a los hijos que forman Mi Corona Real: todos aquellos que Me quitan las Espinas con el concurso de Mi Santa Iglesia, a fin de formar esta Corona de hijos orantes y obedientes a Dios. Cuando todas Mis Espinas se fueren, gracias a todas las Santas Misas celebradas en el mundo entero, entonces, nada más se opondrá a Mi Fuerza unida a la vuestra para combatir todas las fuerzas del Mal, actuales y futuras.

            El Papa, es Mi Iglesia, prudente pero activa, porque ella es obediente a Dios.

            Sólo el Amor puede vencer todas las tendencias malignas y los planes diabólicos. Orad, como Yo os lo pido y ya os lo he hecho saber. PedidMe la Fe. Yo os doy la Esperanza.

            No respondas a quienes se oponen a lo que Yo te pido. Haz como vuestro Papa, toma otro camino para hacerMe hablar. Porque Yo hablo en ti, JNSR, Mi hija, y Yo decuplicaré tu fuerza cuando debas informar a Mis hijos de Amor de todo lo que Yo te doy.

 

Tu Dios, JESUCRISTO,

vuestro tierno Amor.