DIOS NOS AVISARÁ, PARA COMENZAR LA SEGUNDA PARTE DEL LIBRO

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22 de julio de 2007.

JNSR: Mi Dios, venid a mí, yo Os lo pido. ¡Gracias, Señor!

JESUS: Hija Mía, no hay Misterio alguno para llamarMe y para que Yo venga a ti. HeMe aquí; hija Mía, tú no estás sola. No te sientas desolada, que Yo siempre estoy contigo. Escribe sin llorar, que Yo estoy aquí.

Todo lo que tú vives te parece irreal y desearías ver realizarse ciertas cosas, para creer en ellas, para estar segura. Sé paciente, todo se realizará.

Llora por todos aquellos que no creen y que no querrán seguirMe.

Cuando, de la Nube, tú Me veas aparecer procedente de los Cielos, todos vosotros veréis entonces a Mi Santa Madre Coronada, y todos estaréis entonces en condiciones de comprender que Dios no espera por los hombres, para reconocer la Belleza de Aquella que Dios ha escogido, desde toda la Eternidad, para ser la Madre de Su Hijo Bienamado, Aquella que en el Cielo, ya es la Santa y Divina Inmaculada Concepción.

Hija Mía, tú has escrito lo que Yo desearía hacer saber. Ahora, el Tiempo se prepara para que se vivan todos los momentos que van a formar el Reino de Dios sobre Su Tierra. Serán llamados aquellos que van a escuchar Mi Voz en su corazón. Comprometidos, ellos caminarán hacia Mí.

JNSR: Señor, ¿cuándo vamos a comenzar la segunda parte del libro del Fin de los Tiempos? ¿Deberemos esperar mucho tiempo? ¿Cuál será Vuestra decisión? ¿Cómo podré saberlo? Por favor, respondedme, Señor. ¡GRACIAS!

JESUS: Bastará que la Santa Paciencia venga a ti, para comprenderMe. Lo que tú deseas, aún no es posible. Únicamente Dios conoce el momento en que todo será descubierto porque, como ya te lo he dicho, todo se hará al mismo tiempo, aunque debas escribir todo en una sola noche. La noche anterior al Día, bastará para que todo se desarrolle a tiempo, como Yo lo deseo.

JNSR: ¡Yo Os creo, mi Dios!

JESUS: Entonces, paciencia, porque tú escribirás esta segunda parte, puesto que, como Yo te lo he dicho, ella debe quedar escrita para vosotros y para las generaciones futuras. Dios ha hablado. Consiente en todo lo que Yo haré contigo.

JNSR: ¡Sí, Señor!

JESUS: Entonces, todo se pasará como Dios lo dispone para todos Sus hijos llamados en primer lugar y que Me seguirán. Y en segundo lugar, los otros, porque ellos verán que los primeros están ya al abrigo.

Felices los que creyeron, porque ellos no dudarán en venir hacia donde Yo les conduciré; tanto de noche como de día, Mi Luz será el Faro de todos los caminos que vosotros tomaréis ese día. Yo no puedo revelarte todo Mi Plan hoy, mas tú lo harás en el momento en que Yo lo decida. Nadie debe conocer ninguna cosa, porque Solo Dios conducirá a Su Pueblo al Abrigo. Los Ángeles serán informados, como tú, en ese preciso momento.

Continúa trabajando por Mi Santa Madre; todo os será tomado en cuenta. Los ciegos persistirán en su lucha contra lo que Yo les pido. Y, no obstante, Dios vencerá con Su Madre Santa, Divina Inmaculada; porque Dios lo quiere. Ya coronada en el Reino de Dios, Ella vendrá, como vuestra Reina, que descenderá a vuestra Tierra, con Su Hijo y Dios, y toda Su Corte.

Feliz de aquél que cree desde ahora, sin ninguna reticencia. Mas vosotros veréis, TODOS, y creeréis entonces que la mano que ha escrito esto, ha sido escogida por Dios para anunciar Mi Regreso Glorioso, porque Mi Gracia se desborda sobre Mis súbditos obedientes.

Ve, hija Mía, que Yo siempre te informaré a tiempo. Bendice a tu Dios de Esperanza y de Amor. Hija, Dios te bendice con la Gloria del Padre y del Hijo en el Espíritu de Dios.

Bendita sea la Santa Divina Inmaculada Concepción, que viene a bendecir a Su Iglesia, por Su Reino de Reina y Madre de la Iglesia.

JESUS y MARIA †

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