MI PRESENCIA EN VOSOTROS
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3 de junio de 2007.
JESUS: En estos tiempos de guerras y de paces
ficticias, tanto los unos como los otros, todos sois llamados a
escoger vuestro campo. Yo os he buscado siempre, en medio de vuestras
vidas, de vuestros trabajos, de vuestras penas y de vuestros pensamientos.
Hoy, más que nunca, Yo espero vuestra respuesta.
Dios os da la
oportunidad de encontraros con vosotros mismos, porque sólo así la
pregunta, tanto como la respuesta, pueden surgir al mismo tiempo de vuestro
corazón.
Pero, ¿cómo, de
vosotros, puede venir lo que Dios espera de vosotros?
Yo estoy ahí, dentro de vuestro corazón, listo para mostrarMe. ¿Acaso no habíamos intercambiado Nuestros corazones? ¿No habéis obtenido Mi Identidad?
Mi Presencia en vosotros es
como Mi Santa Eucaristía, escondida bajo
el velo de vuestras dudas, de vuestra indiferencia, de vuestra negligencia.
Vosotros seguís dudando de que Yo habite
en vuestro corazón, como habito, igualmente en
Cuándo iréis vosotros
a decir, como David en este Salmo (4, 8) de Confianza y de Gratitud hacia Dios,
de Quien, Sólo, viene la felicidad:
“Yahvé, diste a mi
corazón más alegría que cuando abundan el trigo y el vino”.
Yo podría servirMe de
Mi Santa Voluntad pero, hoy, vuestra
Libertad está en causa más que nunca. Y Yo no tengo ninguna necesidad de
David o del más grande hombre de vuestra época, aunque él esté en
“De tu miseria, JESUS te viene a
librar. No olvides jamás Su Ley,
es El quien aboga por tu causa y te defenderá. Su
Promesa vive en ti”.
JESUCRISTO
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JNSR: Dios me ha mostrado, en los
Salmos (119, 153-154), el Elogio de
“Ve mi miseria y líbrame,
pues yo no he olvidado Tu Ley.
Defiende mi causa y protégeme,
según Tu Promesa, vivifícame”.