PARA TI, HIJA MIA, TODO PASARA A SER GRACIA

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22 de febrero de 2007.

 

JESUS:

            Hija Mía, tú debes perdonar a todos los que se oponen a ti, como quiera que sea: ellos no te pueden comprender, ni seguirte ya. Pero todo se aclarará pronto. Continúa creyéndoMe en lo que ahora Yo hago, porque Yo tengo necesidad de tu Fe y de tu escucha, para hacerles comprender lo que Yo deseo hacer de cada uno de los que Me siguen.

            Esta placa de identidad trae bien claro su nombre: soy Yo en vosotros y lo que vosotros hiciereis en Mi Nombre será igual a lo que Yo hago en vosotros. Porque Dios quiere tomar Su lugar en vosotros. Y nada tiene de asombroso que Yo gratifique a Mis hijos sinceros que Me son fieles.

            ¡Yo llamo! Y vuestra respuesta es ya la Mía: Sí, Yo vengo a vosotros, porque algunos ya vienen a Mí en Verdad. El Reino de Dios se instaurará así entre vosotros. ¡Veis la resurrección del viejo hombre con Mi Identidad en vosotros! Dejadles hablar…Si es caro, decidles que con nada, nada se compra en este bajo mundo. Mas lo que Yo te doy, Yo, eso es gratuito ¡y no tiene precio!

            Decidles que quien quiera ver, verá; y quien esconda Mi Luz, pronto no verá nada. Porque Yo os voy a mostrar tantas cosas, que los ojos humanos no serán suficientes para verlas, pues sólo aquellos que tengan a Dios en ellos verán.

            Tú verás, hija Mía de Amor, tú verás por aquellos que no ven todavía, porque Yo te he dado la vista del Espíritu. Mi vista te permitirá ver lo que tu Dios de Amor hará, cada vez más, en este Mundo, hasta que este Mundo cambie con Mi Fe, que Yo voy a hacer crecer en aquellos que comiencen a ponerse en camino.

            No temas: Yo Me dirijo a ese pequeño puñado de Mis hijos fieles. Si vosotros lo deseaseis, ciertas puertas, ciertas escuchas se abrirán, a causa de vuestro Amor por Mí. Y vosotros veréis entonces, los grandes Milagros de Dios, que Yo podré hacer, con tan solo vuestro Amor por Mí. Reuníos. Rezad. LlamadMe. Yo os oigo, mas actuad de prisa, Yo os espero.

Ve, hija Mía, cree en Dios con todas tus fuerzas.

Tu JESUS de Amor †

 

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