*******
13 de febrero de 2007.
JESUS:
Ten coraje, hija Mía. Lo que tú vives ahora es la corriente de este Tiempo, que quiere arrastrar consigo lo que aún se mantiene en pie. Así, todo se torna vacío y sin vida, cuando Dios es retirado de todas las cosas. Lo que aún permanece en pie pertenece sólo a Dios y es resultado de Su Santa Protección, ¡cuán sacudido!
El Sol todavía brilla y el Mundo aún
saca partido de ello, porque
“Pues,
aquél que esté en la terraza no podrá bajar de ella y aquél que esté en el
sótano, no podrá subir a la casa”. Y esto, aún es un
favor Mío para aquellos que desearen escucharMe de buena voluntad porque, por Mi pequeño Resto y a causa de ese
pequeño rayo de luz del Cielo sobre
UNOS están todavía atrasados para
vivir Conmigo los momentos de Mi Juicio y continúan sin querer perdonar a sus
enemigos, mientras que Dios ha perdonado a todos. ¿Sois vosotros superiores a Dios?
OTROS están en trance de vivir Mi Camino de Cruz y derraman, en
abundancia, sus lágrimas sobre su propia existencia… Ningún camino puede
compararse al Mío, porque Mi Camino es
Obediencia y Ofrenda a Mi Padre por el Mundo entero. ¿Haríais vosotros el
Don de vuestra persona, dando vuestra carne y vuestra sangre por vuestros
enemigos, incluso los más crueles?
Sólo vuestro Dios lo ha hecho por cada
uno de vosotros. Bendecid a vuestros enemigos, para asemejaros a vuestro Salvador.
Y TODAVIA OTROS se mantienen al pie de Mi Santa Cruz de Amor,
totalmente ensangrentada, bañada por Mi Preciosa Sangre que no cesa de correr a causa de los pecados, que no hacen más que
aumentar día y noche, porque el hombre, que odia a Dios, no deja de ofender Su
Santo Nombre, que debe salvar al Mundo.
BENDECID Mi Preciosa Sangre, que viene a recordaros que, por ella, Yo he salvado al Mundo, apartándolo de la muerte eterna. Y lo que Me resta por hacer (¡SeguidMe!...) Yo debo hacerlo con cada uno de vosotros, que debéis pareceros a Mí, para realizar esta última Transfiguración, para que el Plan Divino, concebido por Nuestro Padre, pueda, al fin, nacer con vuestro nuevo Nacimiento, aquél que Yo Mismo anuncié a Nicodemo.
Vosotros
debéis nacer de nuevo, porque debéis nacer hoy, no de
Pues el género humano ha sido creado
por Dios para ser divino, como lo es
el propio Hijo de Dios. Y esto se realizará muy pronto. Si vosotros Me ayudáis, el Mundo sufrirá menos en este parto divino. Porque el Cielo y
A causa del Nombre de vuestro Salvador,
el Padre os ama como a El, Su Hijo JESUCRISTO,
Hijo de Dios, y Dios El Mismo.
†
† †