DEJAOS GUIAR
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28 de enero de 2006. Santo Tomás de Aquino
JNSR: Señor, guiadnos, si fuere de Vuestro agrado.
JESUS: Demasiadas ideas al mismo tiempo pueden perjudicar,
así como demasiadas buenas voluntadas pueden andar a los tropezones. Es bueno fijar bien en el pensamiento el objetivo: Salvar a
Mi Pueblo debe primero ser
informado.
Para socorrer a un herido, es necesario, en primer
lugar, que él mismo se de cuenta de que, para tratarle, debe aceptar los
cuidados necesarios, si no, su estado irá de mal en peor. No hay sino una voz que debe levantarse con
Yo recé por
Tú eres la
semilla, el producto que ha dado el árbol. Este trae en sí los frutos y las
futuras producciones. Lo que Yo os doy, es el
porvenir de la tierra que tiene que vivir y, para ello, rechazar el Mal que
existe por todas partes. Yo no te pido que descanses. Mantente despierta, que
la hora es grave. Yo te dije en uno de los Mensajes anteriores:
“No
tengas ningún miedo. Yo sé que vosotros estáis listos para actuar. Vosotros
mismos sentiréis la urgencia cuando se retarde algo previsto para este
recorrido”.
¿No te das cuenta de que Mi elección está de acuerdo
con el estado de este Mundo? Vosotros, que Me servís, vosotros que Me
escucháis, estáis cansados por la
fatiga de traer, en vuestros corazones y en vuestros miembros, a todos vuestros
hermanos que aún no han comprendido cuanto
Dios os ama. ¿Y sabéis también vosotros cuanto
os ama Dios, para haberos escogido?
Dejaos guiar.
JESUCRISTO, motor del Mundo.
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