¿CUÁL ES EL PRECIO DE VUESTRA NUEVA TIERRA?
*******
3 de septiembre de 2005 - San Gregorio Magno
JESUS: La Verdad viene de Dios. Yo te permito que escribas:
He aquí que viene el Fin de estos Tiempos. Todo se cumple según las Escrituras.
Cuando Yo anuncié, a Mis primeros Apóstoles, que iba a morir en Mi Santa Cruz,
a la protesta de Pedro: “yo no Te lo
permitiré”, Yo le respondí: “¡Vete
Satanás, apártate de Mí!”.
Nadie podrá ir en contra de
Y aunque, con vuestros ojos de carne, no hubieseis
visto abrirse los cielos, sabed que son Mi Sufrimiento de Amor y Mi Santa
Obediencia a Mi Padre Bienamado los que constituyen los testimonios de
Este Poder de Amor de Cristo
a Su
Padre Bienamado
y a Sus hermanos en
Dios,
abrió los Cielos para
todas las almas arrepentidas
que
recibieron el Perdón total
de
Hoy, mientras sois avisados, del mayor al más pequeño
de vuestra moderna sociedad, vosotros habéis seguido pecando sin ninguna
vergüenza, contra Dios, contra Su Creación, contra todos vuestros hermanos
sumergidos aún en la pobreza. Sabed que Yo soy manso y humilde de Corazón y Mi
Padre, cuya Bondad es infinita, quiere reparar vuestra insolencia, vuestro
desprecio para con el Hijo de Dios, que dio Su Vida, para que vosotros tengáis
¿Cuál es vuestro agradecimiento?
¿Cuál es vuestro don de Amor a vuestro Dios Creador, Salvador, Santificador?
¿Qué podréis hacer para vuestro Salvador, para glorificar Su Divino Sagrado
Corazón que tanto sufrió por vosotros? ¿Cuál es vuestra Ofrenda de Amor, para
apaciguar ese Manso Corazón que continúa amándoos sin recompensa y que no ha
recibido más que ingratitud de parte de todos? ¿Acaso os acordáis de que Dios
os creó a Su Imagen?
¿Desearíais realmente
pareceros a Mí? RespondedMe a esta pregunta:
Para vosotros, ¿quién soy Yo?
En la subversión de los elementos, en el desprecio del
Amor, está representada vuestra propia Cruz, en vuestra martirizada Tierra. Las
Escrituras os han advertido que en este tristísimo momento al que vosotros ya
habéis llegado, envidiaríais a los
muertos que están en
Vuestro Sufrimiento pasa a ser salvador, vuestra Cruz
es este mundo en el que todavía estáis
clavados, al no hacer sino un solo cuerpo Víctima expiatoria, como vuestro Salvador. Un cuerpo único, formado
por todos los cuerpos reunidos.
“Que ellos no hagan sino Uno” en el Sufrimiento.
“Para que todos sean uno solo
como Tú, oh Padre,
estás en
Mí y Yo en Ti,
que
también ellos estén en Nosotros” (Jn 17, 21).
Y así mismo Dios, que os abrió
He aquí que el hijo
que Dios os confía a cada uno de vosotros, es
vuestra Nueva Tierra. Para toda
Todo es Amor. ¿Y vosotros Me
amáis?
Si Me amáis, venceréis en
Bendecid a vuestro Dios, que os bendice
† Amén.
JESUCRISTO.
†
† †