*******
15 de marzo de 2005 - Santa Luisa
JNSR: Os suplico, Señor,
habladme, no me dejéis sin Vuestra Palabra Santa. Si queréis que yo diga alguna
cosa a Vuestros hijos de la tierra, habladme, JESUS, que yo tengo confianza en
Vos.
JESUS: Yo soy el Dios de tu infancia. Aquél que siempre te
protegió. Oye Mi Pedido: No os separéis
nunca de Mí. Permaneced Conmigo. ObedecedMe en todo. Yo os conduzco a donde
Yo Mismo estoy con el Padre y el Espíritu Santo, en la compañía de Mi Santa Madre
y de todos los Santos que ya están en el Cielo, y con todos los Elegidos que el
Padre unió y reunió en Su Sublime Santidad.
Este Tiempo que
vosotros atravesáis, es como una puerta que será necesario buscar a través de
los alambres de púas. Feliz de aquél
que la encuentra sin dejar allí pedazos de su carne o, peor aún, de su alma.
No tratéis con nadie la forma de
encontrar una vida mejor
porque ninguno os
podrá cambiar la vuestra.
Sólo Dios podrá
mejorar vuestro día-a-día y os podrá ayudar a soportar el sufrimiento que os
oprime; y sin embargo, es el sufrimiento el que, como una barca, os lleva a la
buena orilla. Este sufrimiento vendrá al encuentro de cada uno de vosotros, y
será a causa de él que os iréis a parecer a Mí; él es vuestra Cruz.
Cuando, con el Padre,
Nosotros escogimos DOZULÉ, quisimos glorificar a Francia, hija primogénita de
Cuando Yo os anuncié
la sequía, vosotros no llegasteis a
comprender que se trataba apenas del primero de los tres años. Una vez más os previne y os anuncio que
ella puede proseguir más allá de esos tres años.
Sí, el agua sigue el barómetro
de
Por esto, después de
este año ya iniciado, vosotros podréis sufrir otros cuatro en los que ya no
habrá ningún animal vivo en
Y vosotros creeréis porque veréis, porque todo
lo que hace Mi Madre Santísima es querido por el Padre, aceptado por el Hijo,
aprobado por el Espíritu Santo, que une el Padre al Hijo, y el Hijo a toda esta
Humanidad destrozada. De hecho, vendrá el día en que todos los Pueblos se
unirán a Aquél que les dio
Sí, Yo soy
Tened Fe en Dios,
creed que vuestro Señor JESUS es vuestro Libertador,
que el Padre Todopoderoso Lo confirmó
y que el Espíritu Santo, Fuerza del Padre y del Hijo,
está en El, tal como El Mismo vive en el Padre
Todopoderoso.
Yo soy vuestro Dios Salvador, el Enviado del Padre,
vuestro Salvador,
JESUCRISTO.
Amén.
†
† †