Pide al Señor
29 de Julio del 2004 - Santa Marta
"J.N.S.R.”: “Señor, Tú me permites
hablar contigo y escucharte con mi corazón. Muchas veces, al principio yo no Te
comprendo y creo que en ese instante no he puesto toda mi atención. Pero más
tarde, a veces días o meses después, Tu Palabra vuelve a mí todavía más
ardiente porque ella esclarece lo que yo no había comprendido antes.
De esto concluyo que Tú pones, a primera vista, una apertura en Tu Jardín
Secreto y que luego, cuando mi pensamiento la ha pisoteado bien preguntándose
si yo debo pasar o no, y si está verdaderamente bien en este sitio y no a un
lado, ahí vienes Tú para certificarme que está bien ahí y no en otra parte. Y
esta «yerba» que yo acabo de pisotear muchas veces, es realmente el Camino que
se abre ya para mí y para mis hermanos que pasarán sin temor.
Y esto me recuerda que cuando Tú has invitado a la muchedumbre a sentarse
por primera vez en el campo donde Tú realizaste la Multiplicación de los Panes,
antes que ellos pasen, Tú has puesto Tus pies para hacer advertir que la yerba
estaba verde y no aplastada por los pies del hombre. Tú nos dices: «No tengáis
miedo, no temáis nada: donde Dios se adelanta primero, todo hombre puede pasar
por ahí sin temor y cada uno está invitado a seguir Al que es el Camino, la
Verdad y la Vida».
Hoy día, Señor, si avanzo en este camino, que me ha turbado porque es un
«camino desconocido» para mí y las trampas se multiplican en la oscuridad de
estos Tiempos del Fin, es que por mucho tiempo Tú me hablas de Tu Plan Divino,
que Tú quieres ensancharlo y que me invitas a difundir Tu Palabra. Los Mensajes
que Tú me das, en el mundo entero.
Yo he dado algunas conferencias: en Bélgica y en París así como en
Marsella. Yo me percato entonces que el mundo es realmente demasiado vasto y
que mis fuerzas son demasiado débiles para cubrir el mundo entero.
Señor, yo quisiera tanto ser como águila, fuerte y resistente para volar de
país en país y llevar a todos mis hermanos Tu Palabra de Verdad.
Hoy me encuentro yo entre mis amigos de Bélgica para descansar. Señor, Tú
has querido que yo venga a vivir algunos días aquí, sobre todo para poner mis pies en los tuyos. Yo acabo de retomar Tu Camino en este
lugar, más bien en esta morada que Te honra cada día con la Oración y que Te
alaba por todas las Gracias que Tú concedes a todos Tus hijos de la Tierra, aun
a los que a veces, Te olvidan.
En mi enfermedad, yo me extravío en el sufrimiento.
Para recordarme que solo Tú puedes curarme, me envías a los que no han
cesado jamás de orar por mi curación y de creer en ella. La Oración en común se
hace el arma contra todos los males, porque ella viene a ser la Espada de Dios
que echa fuera al Mal. Entonces, en Tu Camino se encuentran todos unidos y se
Te reconoce, como Tus Discípulos en el Camino de Emaús. Nosotros hablamos Tu
lengua, el lenguaje que será pronto el de todos los países, el lenguaje del
Amor.
Aquí, Alain. Tu hijo, me habla de algo que ignoro totalmente y que jamás ha
llamado mi atención porque, como toda innovación, ella puede tener algo bueno o
malo. Entonces, yo reflexiono que la pieza de moneda lanzada al aire puede caer
de cara o al revés. Yo puedo igualmente alabarte amando incluso a mis enemigos,
como Tú nos has enseñado con tanto Amor. Y de esto concluyo que contigo, Señor,
todo es bueno. Qué importa la innovación si la ponemos en provecho de Dios y de
toda la humanidad.
Es evidente que Tú deseas la Unidad de todos los Pueblos y Tú eres el único
que puede unir a todos los seres de la Tierra en Tu Amor a condición de que
ellos lo acepten. Tú deseas que nosotros trabajemos juntos por la Paz en el
mundo y Tú comienzas a unir en Tu Santa Voluntad a los hijos ya llegados a Tu
Cielo de Gloria con los que Tú escoges aquí abajo para que pueda cumplirse en
la Tierra Tu Plan Divino, como lo está ya en Tu Cielo.
Nosotros recibimos las mismas instrucciones y Tú nos dices que Tus Mensajes
llegarán a ser más y más activos en esta grande edificación. Tus Angeles están
fascinados por ellos. Y hoy, nosotros podemos tener acceso al internet. Avisaremos
a Tus hijos cuando todo esté pronto.
Señor, bendice a Tu hijo que ha sugerido utilizar este medio de
comunicación para hacer pasar Tu Voz. Señor JESUS, Tú pones en camino a Tus
hijos que son activos y deseosos de servirte por todos nuestros hermanos del
mundo entero. En más de millares de Cruces, he aquí los millares de voces;
esto, Tú mismo me lo has dicho y, con el Canadá, seguirán todos los países que
Tú invitarás. Tú me has dicho:
«¡Pronto tú escucharás los millares de voces
que Me bendecirán! Amén».
Entonces, con Alain y Tu servidor A. F., esta realización tomará forma y
nosotros Te pedimos, Señor, Dios Eterno y Todopoderoso, Tu Santa Bendición en
el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén †”.
"J.N.S.R.”
La Respuesta del Señor
El mismo día:
29 de Julio del 2004 Santa Marta
JESUS: “Ven, hija Mía, déjate arrullar
por el sonido de Mi Palabra en tu corazón. Nada es más dulce que Mi Voz que
canta las Maravillas de tu Dios de Amor. Bendícelo. El es grande y está tan
cerca de vosotros, de cada uno de vosotros. ¡Cómo podéis imaginar lo que os
llega cuando Dios toca a Su criatura tan profundamente!
Escribe, hija Mía: esta mañana del 29 de Julio, Yo te hablo de lo que tan
frecuentemente te he pedido hacer, pero que te ha sido imposible hasta este
día, comprender su importancia y su necesidad. Estás ya informada: ahora todo
se hará como Yo lo deseo. Lo más urgente era hacértelo comprender. La técnica es ardua para el pequeño sin la
ayuda del que puede informarle.
No olvides jamás que Yo te hablo muchas veces por la boca de uno de Mis
hijos a quien llamo que venga a unirse contigo para llevar a cabo Mi Obra. Ella
es mundial.
Así el mundo entero puede estar informado en la medida necesaria para cubrir el
espacio y el tiempo. ¡No temas! Estás informada, ahora actúa, o más bien actuad
todos juntos.
Hija Mía, agradece a todos los que están de todo corazón contigo. Ellos
llegan a ser Mis instrumentos activos, Mis voces escogidas para informar a los
países. Continúa escribiendo todos los nuevos Mensajes que Yo te daré a fin de
hacerlos difundir en las ondas del mundo que Yo bendigo. Yo bendigo a todos los
que trabajan para esto. Yo bendigo a los que te han de ayudar. Yo bendigo a los
que escucharán y aprovecharán de todas estas informaciones divinas.
Dios Eterno y Misericordioso informará a Su Pueblo que debe ponerse en
camino al sonido de Su Voz. Las ondas estarán impregnadas de Mi Santa Palabra.
Permaneced fieles Al que Es, que Era y que Viene,
JESUS, el Hijo de Dios Vivo. Amén”.
†
"J.N.S.R.”: “Nuestro Señor aprueba
por tanto la difusión, por internet y por todos los medios a nuestro alcance,
de los Mensajes «Después del Secreto de María» que no serán editados, porque el
último libro está publicado”.